Cada cierto tiempo, una rutilante estrella para salir de la nada para convertirse en una revolución dentro del mundo del fútbol. En los últimos años hemos visto cómo la hegemonía de Messi y Cristiano Ronaldo se imponía incluso a las nuevas estrellas de moda, como Neymar o Mbappe, jugadores que son todavía muy jóvenes y seguramente logren mucho más de lo que han conseguido hasta ahora, aunque en el caso del francés posea ya incluso un Mundial. La juventud de estas estrellas es insultante, y uno se pregunta cómo son capaces de jugar a un nivel profesional siendo tan jóvenes, pero capaces de aguantar toda esa presión. Cada año, una nueva estrella parece nacer en el mundo del fútbol, y el 2019 fue el año de Ansu Fati, un jovencísimo delantero guineano que debutó con el F.C. Barcelona en agosto de ese año, convirtiéndose en el segundo jugador más joven de la historia en jugar con el primer equipo.
Llegar al Barcelona con apenas dieciséis años no es precisamente algo sencillo, pero Fati acogió el reto desde el primer momento y se convirtió en la auténtica sensación del inicio del campeonato, consiguiendo actuaciones estelares y llegando a marcar su primer gol en su segundo partido con el equipo azulgrana. Tras la marcha de Neymar, el equipo necesitaba un revulsivo y lo encontró en el joven guineano, que desde entonces ha tenido una trayectoria fulgurante. El 2020 ha sido un año accidentado para Fati, ya que la competición se frenó cuando estaba en su mejor momento de forma y en esta nueva temporada sufrió una grave lesión de menisco que le ha alejado en las últimas semanas de los terrenos de juego. Sin embargo, Fati ya ha conseguido hacerse un hueco en el Barcelona y en la selección española, donde debutó el pasado septiembre, confirmando que no es flor de un día.
Historia de Ansu Fati
La historia de Fati tiene mucho de especial, porque no es la de cualquiera chico que llega joven al primer equipo de un gran de Europa. El joven nació en 2002 en Guinea-Bisau, un país africano del que salió con tan solo seis años, camino de España junto a su familia. Se quedó en Herrera, una población de la serranía de Sevilla, donde empezó a jugar en el equipo local con ocho años y pronto despuntó, para fichar por el Sevilla. Tras estar dos años en la cantera del club hispalense, Fati aceptó fichar por el F.C. Barcelona en 2012, con apenas diez años, y pasó por todas las categorías inferiores de la cantera blaugrana a la velocidad de la luz. Tanto es así que después de jugar solo algunos partidos con el Barça B y todavía con ficha del equipo juvenil, el delantero llegó al primer equipo para debutar en agosto de 2019, firmando poco antes su primer contrato profesional con una cláusula superior a 100 millones de euros que ya dejaba ver a las claras su enorme talento.
Fue el principio de una fulgurante carrera que en apenas una año y medio le ha colocado como una de las promesas con más futuro del mundo del fútbol mundial. En la accidentada temporada 2019/2020, Ansu Fati jugó 33 partidos con el club azulgrana, entre Liga, Copa y Champions, anotando 8 goles y dando una asistencia, unos números impresionantes teniendo en cuenta que era su año de debut y que el chico acababa de cumplir los 17 años. Su impresionante capacidad de desborde y su talento innato con el balón llamaron la atención de Luis Enrique, seleccionador nacional de España, que le llamó para la convocatoria de la Liga de Naciones, haciéndole debutar ante Ucrania en septiembre de este 2020. En tan solo cuatro partidos, Ansu Fati ya ha tenido tiempo de estrenarse como goleador con la Roja, convirtiéndose así en el jugador más joven en marcar con la camiseta de la selección.
Su enorme talento futbolístico
Lo que más llama la atención de Ansu Fati es la manera en la que encara a los rivales, la destreza que tiene con el balón y sobre todo, la forma en la que se mueve por el campo. Es como si llevara jugando toda la vida entre profesionales, muestra un descaro inaudito y un toque de balón exquisito. Su velocidad y su visión de juego tampoco se quedan atrás, y es que el chico parece saber estar siempre en el lugar adecuado para llevar el peligro a la portería contraria. En tan solo un año, Fati ha demostrado tener un futuro brillantísimo por delante, y aunque ahora haya sufrido una lesión que le pueda apartar durante un tiempo de los terrenos de juego, estamos seguros de que a su vuelta no habrá perdido ni un ápice de su descaro y talento.
¿Cuánto cobra Ansu Fati?
Ansu Fati firmó en verano de 2019 su primer contrato profesional con el F.C. Barcelona, con una cláusula de rescisión que llegó a los 170 millones de euros. Sin embargo, su explosión el pasado año le hizo firmar de nuevo otro contrato al alza con el club barcelonés, aumentado su cláusula hasta los 400 millones, así como su salario, que está en torno a los 660.000 euros anuales. Es aun así uno de los más bajos de la plantilla barcelonista, pero teniendo en cuenta la edad del jugador, es lógico que todavía, siendo casi juvenil, gane un dinero acorde a lo que es una ficha de ese tipo de deportistas. Seguramente Fati vuelva a firmar un contrato antes de finalizar este, en 2022, con un nuevo aumento de sueldo si las cosas siguen como hasta ahora.
Opiniones de Ansu Fati
La llegada de Ansu Fati a la Primera División y su espectacular estreno, a finales del pasado año 2019, provocaron todo tipo de alabanzas al jovencísimo jugador, que demostró una entereza y una serenidad impropias de su edad, pero que le permitieron demostrar su valía en un equipo en el que jugaba con gente como Messi, Coutinho o Luis Suárez, sin que nadie le hiciera sombra. Llenó portadas de periódicos y sonó para los más grandes de Europa, pero el Barcelona se encargó de atarle. En 2020 fue el segundo clasificado en el premio Golden Boy, que busca a los mejores jugadores sub21 que juegan en Europa. El galardón se lo llevó el noruego Haaland, un par de años mayor que Fati, que todavía tiene opciones de hacerse con el premio en estas futuras ediciones.